lunes, julio 9


¿Y la memoria?

 
Después de la tempestad viene la calma, sentencian los clásicos. Regularmente dicha frase es certera, sin embargo, en tratándose de la realidad mexicana no siempre es aplicable. Hoy mismo, después de las elecciones del 1 de julio, la tempestad no ha concluido, es más, apenas comienza.


PRI

Pocas palabras se identifican con inmensos adjetivos como PRI. Si saliéramos en estos momentos a la calle y preguntáramos a cualquier persona que definiera al PRI, si fuera totalmente honesta, esta respondería: corruptos, ladrones, mentirosos, ambiciosos, ignorantes, narcotraficantes, parásitos, diputados, senadores, gobernadores, presidentes, etc. y sin duda, esta persona no se equivocaría.

Es al PRI, como gobierno, al que debemos (claro que con la complicidad de un pueblo ignorante) el subdesarrollo del país y todo lo que esto representa. La ideología y cultura que actualmente prevalece en México, basada en la corrupción, la ignorancia, la deshonestidad, la ambición, la pobreza, marginación, delincuencia, desempleo, inflación, etc., también se adjudica al PRI.

Es al PRI a quien debemos que mientras en el mundo muchas naciones han evolucionado significativamente, la nuestra ha sido eternamente atrasada y saqueada. El PRI es el padre de la corrupción, los compadrazgos, los sindicatos, el retaso educativo y la burocracia mas dañina del mundo.
 
El PRI es quien ha provocado cacicazgos en todos los estados del país. Quien ha aniquilado la competencia en telefonía, televisión y demás servicios necesarios de competencia en un país en desarrollo. El PRI fue quien permitió que personas como Carlos Slim, la familia Azcarraga y otros, se enriquecieran tanto y a costa de un pueblo empobrecido.
 
Es al PRI a quien debemos la falta de crecimiento en PEMEX; la dependencia económica con los Estados Unidos en todas las áreas incluso en las llamadas estratégicas. Es el PRI de los despilfarros económicos, de los dispendios del presupuesto, de la violencia en contra de los opositores: estudiantes, maestros, izquierda política, obreros, campesinos. Es el PRI que dio origen a las guerrillas de los años 1959, 1970 y 1994. Es el PRI de Díaz Ordaz, Durazo, Salinas de Gortari, Yarrington, Colosio, Posadas Ocampo, Hank González y su dinastía, Montiel y ahora Peña Nieto.

Es el PRI de siempre, el viejo PRI, el PRI que logró hacer de la política lo que hoy tenemos, y a la que, muchos se preguntan por qué, un numero importante de mexicanos ha decidido elegir para que los aniquile, como buitres que son, un sexenio más.

Pero ¿porque ganó el PRI? Ganó porque era un pacto que las elites del país habían consolidado desde hace seis años. Ganó porque Televisa y TV azteca lo construyeron desde hace un sexenio. Ganó porque su cara bonita y su cabeza vacía fueron idóneos para consolidar el títere que es de los intereses económicos y políticos de una clase, la mas pudiente, la que controla este país, a la que no le conviene la igualdad y la justicia. Ganó porque tuvo la suerte de haberse postulado en un país sin educación, sin memoria, sin dignidad.

Peña Nieto ganó porque no piensa, ambiciona. Porque no cuestiona, obedece, porque lo motiva el dinero y no la dignidad. Ganó porque se aprovecha de un pueblo ignorante que se traga el cuento de la democracia, del estado de derecho, de las instituciones, de las elecciones limpias, de las encuestas, de la pluralidad partidista, de los personajes creados: donde el príncipe del país tricolor cabalga sobre su caballo blanco, aparece en las pantallas de todo el reino, bien peinado, elegante y juvenil, y logra seducir a una “gaviota” con la que gobierna el reino del Estado de México, y no por sus obras a favor del pueblo, ni por sus hazañas épicas, sino por las portadas en las páginas de sociales y el gasto millonario que hace del erario publico, logra enternecer a un miserable pueblo que no tiene que comer pero atento espera el desenlace de la feliz historia, que culmina con el idilio de una campaña millonaria, donde dos televisoras tocan en el fondo el vals de los ignorantes y enajenados, con bocadillos de spots, encuestas, reality show, fútbol y con aviones privados e incursiones en noticieros, telenovelas y programas de mayor rating, invitan a los vasallos a que caminen tomados de la mano hasta el jardín de IFE y una vez ahí, crucen una boleta como símbolo de agradecimiento a un Peña Nieto que ha dejado que sus subordinados conozcan un poco de su felicidad, de su vida en sueño. Con ese voto el pueblo deja de ser el eterno espectador de las telenovelas y series con las que amanece, duerme, llora y sueña, ahora, el voto representa formar parte de una historia mágica en la que nunca lo habían incluido; es un pueblo que como autómata camina con dirección a las casillas donde por fin, verá culminado el feliz desenlace de la mágica historia de Peña Nieto y su carrera presidencial. La trama ha concluido, el telón comienza a bajar. El arbitro anuncia el triunfo de Pena Nieto y los electores siguen aletargados por las migajas de protagonismo que les regalaron los actores principales (además de las tarjetas y prebendas que recibieron) sin embargo, cuando los aplausos se terminen, y el pueblo se de cuenta que otra vez lo utilizaron y le mintieron, será demasiado tarde, las luces se habrán apagado y como siempre, los protagonistas, una vez mas, sólo podrán ser vistos a través de una pantalla, donde para olvidar el mal sabor de boca, se les atestará una buena dosis de comerciales, por aquello del próximo sexenio.

¡En hora buena, este es el nuevo PRI! por el que muchos ingenuos mexicanos decidieron votar. Este es el sistema electoral del país: una farsa que se adminicula a otras: presidencia, congreso, partidos políticos, IFE, etc.

Este es nuestro pueblo, pobre de él, ignorante de él...
 
 
Por: Victor Hugo González Rodríguez




lunes, julio 2

Primavera mexicana



Primavera Mexicana

Pocos momentos en el desarrollo del hombre son tan ilusionantes, aspiracionales y revolucionarios como la juventud. Una vez que termina la adolescencia, se da paso a la juventud;donde ya se dejaron atrás los problemas sociales y hormonales, y es entonces cuando el mundo y los demás cobran importancia. Las injusticias nos duelen y motivan a luchar. Es en esos momentos cuando nuestra ideología se consolida, básicamente con la carga de teoría política y social adquirida hasta entonces, y con cada una de las influencias que acaecen en nuestro entorno y contexto. 

Los jóvenes de la revolución (antes de 1910), sin duda fueron influidos y determinados por el movimiento armado, por ello no era casual que los grupos en pugna fuesen nutridos con jóvenes –a veces de forma voluntaria, y muchas otras obligados. 
1968 es el mejor ejemplo –en el mundo–, respecto de la participación e influencia de los jóvenes. Sin dicho movimiento hoy no se podría explicar la libertad sexual, la igualdad de género, la participación política de los jóvenes, la cultura juvenil y demás aspectos que sin los movimientos, básicamente estudiantiles, hoy seria impensable.
El talento de García Márquez, de Carlos Fuentes, de Julio Cortazar, de Mario Vargas Llosa, entre otros, sin el reconocimiento de la entonces juventud que da vida al boom latinoamericano, no hubiera gozado de la difusión e importancia que hoy tiene, y que sin dudaha formado una literatura y una forma de vida para gran parte de los jóvenes del continente.





La llamada "primavera" en medio Oriente, fue protagonizada por jóvenes, quienes utilizaron como herramienta la tecnología, basada en las redes sociales, como ha sido constante por este sector: ya en la revolución mexicana fueron los impresos la base de la divulgación, lo queretoman los jóvenes del 68, quienes además recurrieron a la palabra, a través de asambleas y campañas de "boteo", concretizando un método de lucha social basado en la organizació; los nacientes intelectuales del boom latinoamericano, para expresarse hacen suyas las letras; los jóvenes de medio oriente se apoderan del Facebook y del Twitter
La juventud a lo largo de la historia contemporánea, ha sido la punta del iceberg del pensamiento renovado; es gracias a ellos que en 1999 las cuotas en la UNAM permanecieron intactas. ¿O no a caso Jesús era joven cuando fue asesinado? ¿Que edad tenia Fidel Castrocuando atacó el cuartel Moncada? ¿A que edad Ernesto Guevara era ya héroe viviente del continente? 
En este contexto es que las clases políticas y económicas que actualmente controlan el mundo, han dirigido sus esfuerzos en "normalizar" a los jóvenes: convertirlos en entes idénticos, que lo único que hagan sea obedecer, comprar y mantener el status quo que les conviene, para continuar gozando de sus privilegios, lo que como se advierte de lo ya narrado va en contra de la naturaleza del joven, que como características, tiene la de todo cuestionar.
 Las tecnologías que hoy, quien lo dijera, han dado pauta para activar la participación política de los jóvenes mexicanos, han sido una de las causas de su sumisión y deshumanización, que orquestan las clases dominantes para así, inhiba el periodo más transparente y honesto del desarrollo humano: la juventud. 
Los poderosos del mundo saben que si aniquilan los sueños y la participación de los jóvenes, garantizan adultos normalizados, enajenados y útiles para sus fines, por eso no es extraño que en México, precisamente ahora, los adultos sean tan irresponsables para permitir que el PRI regrese a los pinos.
Las clases dominantes, que todo lo controlan, gastan muchas de sus energías y recursos, en lograr que los jóvenes se mantengan "ocupados" en el internet, en las redes sociales, en la televisión, en la moda, en la música de estribillo, en las necesidades de consumo, y no en los parques, en las plazas públicas, en los cafés, en los salones de clase, en las mesas de sus hogares, en las canchas deportivas, en los talleres de teatro, música, literatura, cine, etc., discutiendo, cuestionando, cambiando el mundo, su mundo.
Es mentira que los jóvenes sean el futuro, son el presente, siempre lo serán.
Son los jóvenes quienes ahora, nuevamente, van a la vanguardia de la indignación y la movilización que provoca el cinismo de inefables personajes como Peña Nieto, quienes a la vieja usanza del priismo que hundió al país, creyó que descalificar a un grupo de jóvenes de la Universidad Iberoamericana seria olvidado como siempre. Que ante su arrogancia e ignorancia, los jóvenes continuarían siendo el sector que eternamente duerme y agacha la cabeza cuando recibe una orden. ¡Gran error! jamás se debe subestimar a la juventud, algún día, sin duda, despierta, se sacude las resacas de la manipulación económica, política, cultural y social, y lucha para consolidad un mundo mejor.
¡En hora buena la naciente primavera mexicana! Es tiempo de apoyar a los jóvenes que hoy gritan ¡basta! Es momento de recobrar la memoria y volver a mirar a esos jóvenes que con dignidad se organizan para que su voz no sólo sea escuchada, además, que su idea de un mundo diferente se consolide, pese a políticos corruptos e ignorantes, pese a un sistema que los pretende apaciguar, pese a los medios de comunicación que los manipula y pese, incluso, a los adultos que los ven como un montón de idealistas.

Por: Victor Hugo González Rodríguez



              LA FIRMA      DEL COMANDANTE                   Victor Hugo González Rodríguez ...